"Es duro, sí, pero necesito
despedirme de este club grande donde he pasado
seis maravillosos años. De verdad que quiero darle las gracias a todos los trabajadores de la Entidad, a los compañeros de vestuario, el cuerpo técnico, médico, utilleros, directivos... Es complicado pero
quiero decirles gracias y hasta luego", comenzó el comandante Drago, visiblemente emocionado.
Así arrancó el primer aplauso de la tarde, tras el que prosiguió hablando:
"Quiero decir también que me voy de un club grande de Europa, que estaba muy a gusto aquí. Pero, las circunstancias de la vida y loa decisión del Club, de su director deportivo y su presidente, a los que no les tengo nada que reprochar porque son grandes personas, me voy.
Pero seguro que, un día, volveré. Muchas gracias a todos y, principalmente, a la afición, que es una de las mejores del mundo".
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