Hoy me he levantado un poco meláncolico y escuchando a la más grande de las grandes, Rocio Jurado con la canción "Que no daría yo", hay un estribillo que dice:
Que no daría yo, por escaparme
a un cine de verano
en donde alguien me diera
el primer beso de amor,
que no daría yo, por sentarme
junto a èl en ese parque
viendo como se ponìa el sol.
Y se me vino a la cabeza
los cines de verano que perdimos y en los cuales
pasábamos ratos de ocio, aplacando un poco la calor de estas propias fechas, y de camino, como no,
intentando meter mano a nuestra chica del momento.
Recuerdo que por entonces, todo solar libre que había en
Sevilla, se convertía con la llegada del verano, en cine.
Era una
forma peculiar de sofocar la calor veraniega, ya que por entonces «
No había dinero para veranear, ni aire acondicionado como ahora, no teníamos DVD, ni tantos canales de televisión. El cine de verano era la diversión por antonomasia».
Aunque en la historia del cine de verano sevillano
destacan algunos como los de mayor tradición y los más importantes -
Avenida de Verano en Triana, el Palmera, el de Santa Catalina y el Prado de San Sebastián- también se montaban cines como
el Alfarería, Emperador, Evangelista, San Gonzalo y otros
clásicos como el Ideal o el de Pio XII, entre otros, donde el búcaro de agua y las pipas hacían estragos.
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yo en mi casa de vecinos |
Por aquél entonces
vivía yo en La Macarena, concretamente en la
Plaza de San Gil, una casa de vecinos, que
mi abuela compró, alquilando 3 habitaciones de las 7 que disponía la casa, donde la cordialidad reinaba por sí sola.
Mi abuela era de Lebrija, reino de
los caracoles, por esa época, fruto del cual ganó un poco de dinero para comprar la casa y
establecer su negocio. que aún perdura por generaciones.
Por aquél entonces,
se podría contar con los dedos de la mano,
los bares que ponían caracoles, habituándolos como
hoy se ponen los altramuces en ellos, gratis, pero la vida cambia y esto de los caracoles más,
ahora no hay bar que no los trabaje.
Pues sí, aún
me acuerdo del cine Ideal, porque era el más cercano a mi domicilio, era un diario el ir con amig@s, a ver
las clásicas películas del Oeste o de Bruce Lee, saliendo todos
al finalizar la película, pegando tiros o pegando patadas, ja ja,
!Que recuerdos!
¿Y tú te acuerdas de ellos?