Comenzamos el año igual que lo terminamos, regalando puntos a los contrarios que están más necesitados, haciendo aguas en defensa, fallando en ataque, sin centro del campo con capacidad de organizar, con mucho control de balón y escasísimas oportunidades claras.
No se ven visos de cambiar. Han pasado unos meses ya desde que comenzara la Liga y este
Sevilla sigue en la misma línea de siempre. Hay cosas que no se entienden, como la opción de
Fazio en lugar de Medel, cuando
el chileno es el único capaz de destruir y crear en este equipo mientras
el argentino se duerme en los laureles una vez sí y la otra también. Con la entrada de
Gary Medel en el campo, se notó el cambio de juego.
Tampoco se entiende las ansias de fichar un delantero de garantías (hace muchísima falta) cuando nuestra principal carencia está en el banquillo y en quien nos dirije. Siento decirlo así, pero
Marcelino debe tener las horas contadas en el
Sevilla. Hay que traer alguien con carisma, con capacidad de resolución, con ganas de triunfar, con sapiencia para salir de los apuros en los que nos empeñamos en meternos durante todos los partidos. Hay que buscar un recambio ya.
Por otra parte,
buen partido de Reyes en su re-debut, lástima que sólo él tenga la calidad para hacer cosas.
Perdimos tres puntos imperdonables de perder, a ver por donde nos sale el míster en la rueda de prensa ahora, a ver si se acuerda otra vez de los goles inverosímiles, y sobre todo, a ver si no se carga a
Varas de un plumazo.
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