Volver a empezar

¿Cuántas veces hemos dicho a alguien con alguna decena de años menos que nosotros aquello de "si yo tuviera tu edad sabiendo lo que ahora sé"?

Pues da la casualidad que volveremos a tener la edad que queramos, porque esto es futbol, y el fútbol cada año comienza de nuevo.

Y lo mejor es que no hemos de volver a vivir experiencias para saber cómo se afrontarían en un futuro, porque nuestro pasado está a nuestro servicio y en el formato que deseemos.

Por eso hemos de volver a empezar, y aprovechar lo vivido para tratar de no repetir lo nefasto, y tratar de mejorar o, al menos, igualar aquellas situaciones que nos hicieron vivir tanto como disfrutamos.

Estamos a tiempo, porque a estas alturas (ni siquiera se ha agotado la liga en Segunda División para poder diseñar el calendario de la Liga BBVA 12/13), estando todo por hacer, ya algo hemos adelantado: Hervás, Rabello, Diego López... aunque quizá este tema sea secundario. Y digo secundario en todo su sentido: Primero la HUMILDAD (esa que se dejó de lado por parte, posiblemente, de todo el sevillismo, desde el palco a la peña menos pudiente -pero no menos sevillista-), que nos llevó a poner por delante la defensa de aquello que se sentía como el aire bajar a los pulmones al respirar hondo, y que se llama Sevilla Futbol Club. En segundo lugar, los HOMBRES para hacerla efectiva sobre el césped.

... Y la suerte, pero esa suele aparecer si se busca más que si se encuentra. Aunque como acabo de escribir: suele

Estamos, porque lo tenemos todo por delante, a tiempo de todo lo mejor. Sólo queda esperar que todos se acuerden de aquella eficiencia en su labor que, en otros tiempos, concluía con el sevillismo puesto en pié en partidos en los que los resultados no eran precisamente los deseados.

Tenemos la experiencia, los medios (que otrora ni siquiera imaginábamos), y la deuda mutua de entrega por un lado y de resultados por otro, que nos obliga a hacer de la 12/13 la del año del reencuentro del Sevilla Futbol Club consigo mismo en todas las partes que le dan sentido.
Y así, sí o sí, volveremos a tener Cien años aún rondando los ciento siete (algo habremos rejuvenecido...).