√ Si el rival no sufre....

Si el rival no sufre, difícilmente se ganan los puntos en juego. Esta noche los puntos los ha salvado el de siempre...Kanouté.
Mucho juego en medio campo, pero al igual que nos pasó en Villarreal, sin profundidad y sin crear ocasiones de gol que pongan nervioso a un rival ramplón como la Real, incapaz de asustar y con lagunas defensivas que casi no hemos sabido atravesar.

La sensación que deja este Sevilla en su tercer partido de liga no son negativas, al contrario, son sensaciones de no tener los errores defensivos que tan mal resultado nos dieron la pasada temporada, aunque de vez en cuando nos empeñemos en fastidiarnos con pases erróneos y desvarajustes defensivos.

Este equipo no tiene la obligación de golear a quien se le ponga delante pero sí tiene, amén de plantilla, la obligación de crear muchas oportunidades, muchos ¡¡ uy !! en las gradas y mucho peligro a la hora de plantarse en el área rival.

Este Sevilla, hasta el momento, no ha encontrado esta forma de juego y esperemos que lo haga y esto de estos partidos no se convierta en sello de identidad.