Así le llamaría
Del Nido a un jugador del
FC Barcelona, de quien recuerdo el extraordinario aplauso con que le despidió el
Ramón Sánchez Pizjuán hace algunos años en
Champios League.
Un partido cuyo recuerdo cuelga de las paredes de muchas peña sevillistas como de el uno de los mejores partidos del
SFC de las últimas décadas.
Y el
sevillismo premió a
Cesc (de Francesc, de Francisco) quién parece que llegó a Sevilla un poco requeante y nos dejó varias muestras de su excelente fútbol.
Pero ayer Cesc se pasó, no varios pueblos, sino varias comunidades autónomas como mínimo. No creo que
Pep haya enseñado a
Fábregas a insultar del modo que presuntamente lo hizo. No creo que el respeto hacia los mejores (y hacia
mayores) sean del color que sean, no lo enseñen en La Masía. Y si no lo enseñan, dudo mucho que sus padres no se lo hayan enseñado tampoco.
¡¡¡Busquen imágenes por favor!!! Busquen imágenes porque Kanouté no es hombre de mentir, ni de robar. Todo lo contrario,
Kanouté es... Kanouté, uno de los hombres más íntegros que ha pasado por el fútbol español en los últimos años: pura entrega, pura generosidad dentro y fuera de los terrenos de juego. Y
Cesc Fábregas no tiene derecho alguno a insultar ni a él ni a nadie, sea del color que sea.
Si ahora
Cesc quiere demostrar que también le sobra grandeza, debería salir a los medios y decir
"sí, yo dije lo que dice Kanouté, lo siento". El fútbol español lo entendería (pulsaciones a 200, minuto 92, 0-0 en el Camp Nou, el Barça con Varas enfrente, y la impotencia que terminaba culminando en el silbato del árbitro que pita un penalti que un canterano peor, mucho peor pagado que el propio Fábregas, mandaba el balón fuera de su marco).
Se acabó el partido, bajaron las pulsaciones y si como dicen, lo que ocurre en el césped, en el césped se queda, toca ahora que, si la grandeza es tal en ese inmenso club acumulador justo de títutlos,
Cesc debería ser llamado al orden, o por sí mismo, publicamente solicitar una aclaración de lo sucedido.
Kanouté no merece quedar como el agresor que no es.
La pelota está en tu tejado
Cesc, si te quieres enterar, te lo agradecemos, si no, ya sabremos qué tipo de futbolista eres.
Pero por favor, ¡¡¡busquen esas imágenes!!!
En las que siguen, hacia los 15 segundos se ve como
Kanouté se vuelve hacia Fabregas ¿ por qué? (Yo no soy Mourinho)