Y pensábamos que íbamos
a asustar en el Bernabeu. Y pensábamos que íbamos
a dar la campanada camino a Europa. Pensábamos tantas cosas. Somos tan ilusos.
De nuevo
"no hemos hecho otra cosa que demostrar que esta temporada estamos a lo que estamos", a dejarla pasar sin más.
A dejar pasar una temporada en blanco para empezar
a planificar una nueva con ilusiones renovadas y con objetivos que según la plantilla que formemos nos marquemos en un sentido un otro.
Debemos planificar la nueva intentando
curar la herida que nos dejó Dani Alves con su marcha en esa banda derecha,
primero con Dabó, después con
Sergio Sánchez y por último con un desacertadísimo
Coke, que
más bien está para un Rayo que para un Sevilla.
Por último y debido a
la imposibilidad de seguir el partido por TV he tenido que
seguirlo a través de nuestra radio.
SFC Radio. He de decir que
a veces me sacan de mis casillas Cabrera, Alberto y demás interlocutores con
su pasión ciega hacia nuestro equipo, hasta el punto de no aceptar las críticas de los oyentes para con el equipo y ver siempre como principal culpable al árbitro del encuentro, llámese Mateu, Lasa, Rodríguez, etc...
No señores. Abran ustedes los ojos y comprendan de una vez lo malo que somos por nosotros mismos, sin necesidad que nos echen un cable los de amarillo, negro o como quiera que se vistan para la ocasión el trio arbitral.
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